En abril de l973 presenté una primera versión, con guitarra y violoncelo, en el Teatre de la Gaite-Montparnasse en el programa "Libre Parcours Récital" de France Culture. Se trataba de una selección del poema y duraba aproximadamente 15 minutos. Viviendo ya en Segovia, en 1975, retomé la composición con intención de cantar el poema completo y ampliar la instrumentación a un trío de guitarra, violín y violoncelo. El Sábado Santo, 9 de abril de l977, estrenaba la versión "definitiva" en la iglesia románica de San Juan de los Caballeros. El primero de junio de aquel año grabé el disco, con Jesús Corvino al violín y Eduardo Gattinoni al violoncelo, bajo la dirección artística de Alejandro Masó: Cántico Espiritual (Hispavox 1977). En julio lo presentábamos en el Teatro Colón de A Coruña y en septiembre en el Teatro Bergidum de Ponferrada. El Cántico empezaba a caminar.
La primera presentación en Madrid tuvo lugar en el Centro Cultural de la Villa, durante una semana del mes de mayo de 1978, con Isabel Serrano al violín y Gattinoni al violonchelo. En 1982 di cuatro recitales en el Teatro Español, invitado por su director José Luis Gómez. Fue entonces cuando María Zambrano, desde su exilio en Ginebra, me regaló el comentario de sus Notas al Cántico que incluimos en el programa de mano de aquellos conciertos en los que me acompañaron Rafael Villanueva al violín y Tomás Garrido al violonchelo.
En 1984, me invitaron a presentar el Cántico en el Teatro Real de Madrid en el marco del I Festival de Otoño. Le encargué entonces una nueva instrumentación al compositor Ángel Barja para piano (Agustín Serrano), guitarra (Gerardo Arriaga), violín (Francisco Romo) y violonchelo (Mariano Melguizo), que estrenamos el 24 de septiembre. Esta versión de Ángel Barja la volveríamos a interpretar en la Seo de Zaragoza y en la iglesia de San Nicolás, en León, con motivo del IV Memorial Ángel Barja.
En 1991, año en que se conmemoraba el IV centenario de la muerte de san Juan de la Cruz, programaron el Cántico Espiritual en el Ciclo de Cámara y Polifonía del Auditorio Nacional. Acompañado en esta ocasión por el concertino de la ONE, Víctor Martín, y Mariana Cores al violoncello. Fue el inicio de una larga gira por toda la geografía española y conciertos puntuales en el extranjero, como Roma, Saintes, Rabat, Aquisgrán, Ravenna… También con motivo del IV centenario, TVE realizó un programa especial en la iglesia mozárabe de San Miguel de Escalada, que dirigió Eduardo Toral, y propició la segunda grabación discográfica de Cántico Espiritual, con Alexander Kozulin al violín y Carlos Cardinaal, al violonchelo.
En 1996 el organista y compositor Mark Fielding escribió una versión para cuarteto clásico de cuerda, que estrenamos en la inauguración del Teatro Bergidum de Ponferrada, con Mariana Todorova y Juan Luis Gallego, al violín, Jensen Horn-Sin, a la viola, y Rafael Domínguez, violonchelo. Esta versión con cuarteto la interpretamos también en la Iglesia de San Millán de Segovia y en la Plaza de Las Pasiegas de Granada.Cada año eran más numerosas las actuaciones en espacios sagrados, como en el IV Festival de Música Sacra de Maastricht (Holanda), inaugurado con el Cántico, la Catedral de Astorga, Claustro de la Catedral de Santander, Monasterio de San Jerónimo en Granada, la Catedral de Oviedo, y en teatros y auditorios como el Palau de la Música, el Auditorio Manuel de Falla, en la Quincena Donostiarra, en el Corral de Comedias de Almagro, el Auditorium de Palma de Mallorca, o la Plaza de la Quintana en Compostela, entre tantos otros escenarios.
En el año 2000, con la colaboración de la COPE, realizamos una intensa y extensa gira con el Cántico por diez ciudades de España, en escenarios todos maravillosos: Monasterio de Santa Ana (Avila), Iglesia de Santa María del Mar (Barcelona), Auditorio Nacional (Madrid), Iglesia del Sagrario (Sevilla), Monasterio de San Juan de los Reyes (Toledo), Catedral de Tortosa, Palau de la Música (Valencia), Santa María la Real de las Huelgas (Valladolid) y la Sala Mozart del Palacio de Congresos de Zaragoza. Junto con el programa de mano, el público recibía un CD que grabamos ex profeso para la gira, con Daniela Tanti al violín y Carlos Cardinaal, al violonchelo.
Además de la Escolanía de Segovia, he tenido el gusto de cantar el Cántico en numerosas ocasiones con otras formaciones corales, como la Camerata sine Nomine, Ad Libitum, Escolanía de los Salesianos de Sevilla, la Escolanía de los Palacios, la de Heriberto Ampuria, la Agrupación Coral de Chiclana, la Escolanía del Canto Alegre de Medellín (Colombia), la Escolanía del Misteri de Elx o el Coro de RTVE, entre otras.
Desde hacía tiempo me rondaba la idea de poner música a los otros poemas mayores de San Juan: La llama, La Noche y La Fuente. También le daba vueltas a la idea de incorporar un coro infantil en algunos pasajes del Cántico, como la “Respuesta de las criaturas”. Tuve entonces la suerte de conocer y contar con la complicidad de María Luisa Martín, directora de la Escolanía de Segovia, y en el año 2002 ofrecimos nuestro primer concierto juntos en el Festival de Otoño Soriano, invitados por su director, Odón Alonso. La Escolanía de Segovia participó también en el disco Canciones del alma, dedicado enteramente a San Juan de la Cruz. Hay en YouTube algunos videos de cuando presentamos el Cántico Espiritual en el Teatro de La Abadía, en febrero de 2011, y en la iglesia de San Juan de los Caballeros, en abril de 2012, con motivo del 35 aniversario del estreno allí del Cántico.
La celebración del Xacobeo 2004 propició una extensa gira de conciertos con el Cántico Espiritual de San Juan dela Cruz, en la primera parte, y cantares de Rosalía de Castro, en la segunda. Fue una gira inolvidable junto con la Coral Ad Libitum, por diez ciudades, en otros tantos escenarios impresionantes: Iglesia de San Pedro en Lugo, Colexiata de Santa María Do Campo en A Coruña, Iglesia del Carmen de Padrón, Concatedral de Ferrol, Colegiata Santa María en Vigo, Colegiata del Sar, en Compostela, Catedral de Tuy, Basílica de Santa María La Mayor de Pontevedra, Catedral de Ourense y la Catedral de Mondoñedo. Una pena no haber grabado aquellos conciertos místicos y rosalianos.
El 8 de junio de 2005 “Nueva Economía Forum” organizó un concierto conmemorativo de su V aniversario en la iglesia de Los Jerónimos de Madrid. Junto a las violonchelistas Hilary Fielding y Mariana Cores, intervino la Escolanía de Segovia dirigida por María Luis Martín. La grabación del concierto se plasmó en un una nueva versión discográfica del Cántico: Concierto de amor vivo. Algunos años más tarde, la editorial de poesía Vaso Roto, edita el libro-disco "Cántico Espiritual y otras canciones de san Juan de la Cruz", añadiendo un tema inédito: "Con arrimo y sin arrimo". En el libro se recogen también los testimonios de María Zambrano y Gerald Brenan sobre el Cántico Espiritual.
En 2015, con motivo del IV centenario de la muerte de Santa Teresa de Jesús, la Orquesta y Coro de RTVE encargó al compositor Fernando Velázquez una versión sinfónica del Cántico Espiritual y de las canciones que había compuesto sobre poemas de la Santa, recogidas en el libro-disco La voz descalza. Con notas al programa de la musicóloga Inés Mogollón, estrenamos esta versión el 3 de octubre en el Teatro Monumental de Madrid. El concierto fue retransmitido por TVE2.Este mismo concierto lo presentamos el 30 de junio de 2016 en el FIMD de Granada, en el Palacio Carlos V de la Alhambra. Y con el Coro y solistas de ORTVE, en la iglesia de San Francisco de Santo Domingo de la Calzada, en el Monasterio de las Huelgas, en Burgos, dentro de la veladas de "Música y Literatura" organizadas por Patrimonio Nacional, y el 7 de diciembre en Roma.
En diciembre de 2017 Patrimonio Nacional nos invita a celebrarlo , dentro de su tradicional Concierto de Navidad, en la Capilla del Palacio Real de Madrid acompañados de la Escolanía de El Escorial, concierto que emite TVE2 el día 24.
Antonio Colinas. Amancio Prada: algo más que un juglar
Mi primer recuerdo de Amancio Prada es remoto. Era sólo un nombre, el de un cantautor inusual leonés que, como yo, buscaba en el París de finales de los años 60 caminos nuevos para su Arte. Su nombre lo mantengo, en aquella memoria temprana, junto a los de algunos otros escritores que en aquellos años forcejeaban por abrir fuera nuevos caminos para la cultura española.
Luego, unos años después, llegó ese momento en el que cada cual se reveló con una obra emblemática. En el caso de Amancio Prada, al menos para mí, esa revelación se dio con su versión del “Cántico espiritual” de Juan de la Cruz, uno de los poemas más hermosos y emblemáticos de la poesía no ya española, sino universal. El “Cántico” es un poema único por misterioso, intenso, heterodoxo, turbador y como letra para un músico no responde al cómodo verso de arte menor, monocorde o circunstancial de otros textos musicados.
El reto era muy difícil, pero Amancio lo superó con una inspiración musical que, hasta el día de hoy, resiste el paso del tiempo. Es más, su versión del “Cántico”, como la voz del cantante, han ido ganando con los años –como los buenos vinos– en calidad. No existe prueba mejor y mayor para una obra de arte que la de superar la prueba del paso del tiempo. En el caso de esta obra primera la superación de la prueba ha sido incuestionable, hasta el punto de que, con su versión, él nos ha ofrecido una nueva lectura del poema. De ahí, como yo he dicho y repetido, que ahora poseamos dos versiones del “Cántico”: la del texto sanjuanista y la musicada por Amancio. Las dos son verdaderas y se complementan y enriquecen mutuamente. Son muchos también los que han llegado a una mejor lectura del poema –estudiantes sobre todo– a través de la versión musical.
De esta resistencia al paso del tiempo ha sido, sin duda, la mejor prueba la interpretación que Amancio Prada nos ha dado de esta obra culminante el pasado día 18 de septiembre en el Auditorio Juan del Encina de la Universidad de Salamanca. La ocasión tampoco era baladí: el concierto se celebraba dentro de los actos del Octavo Centenario del nacimiento de la Universidad salmantina y de su fundación por el rey leonés Alfonso IX. Pero en esa fecha señalada, por la mañana, se celebró en la ciudad otro de los actos conmemorativos que consistió en la presencia de 250 Rectores de universidades de todo el mundo que se reunieron en el Paraninfo bajo la presidencia de los Reyes de España y que luego desfilaron, en compañía de una amplia representación de Doctores de la Universidad por las calles de la ciudad. Presencia, pues, en el concierto de Amancio Prada por la tarde de esa representación de Rectores, de ese selecto público que recompensó la actuación del artista con una prolongada, inusual salva de aplausos. No era posible contar con un público más selecto y objetivo para valorar esta nueva interpretación del “Cántico” sanjuanista, ayudada en esta ocasión por el Coro de Radio Televisión Española, y con dos solistas –un violín y un violonchelo– muy especiales. Pero con darse estas condiciones únicas, la prioritaria fue la propia interpretación de Amancio Prada, con su voz más vigorosa y madura que nunca, llena ahora de nuevos matices con un acompañamiento vocal e instrumental de lujo.
En varias ocasiones hemos escuchado que Amancio Prada “es el último de los juglares españoles”. A mi entender, la labor de este autor va más allá de tal denominación, pues desde su objetividad vocacional ha sabido librarse de aditamentos de carácter sociopolítico o circunstancial que han arropado a otros cantautores. Como en el caso de la pensadora María Zambrano –por otros caminos, claro– Prada ha sabido ser, ante todo, fiel a la poesía como fenómeno anímico, espiritual, existencial, sin mistificación alguna. Y fiel a los poetas. Ha sido sin más fiel a ese género literario que también es algo más que un género literario. Porque no hay vida sin poesía ni poesía sin vida. Amancio Prada lo sabe y ha sido fiel a lo esencial: comunicarnos la poesía, sí, como un juglar, en las calles, plazas y auditorios, pero a la vez ofreciéndonos una hermosa prueba de amor a la poesía y a los poetas.
De ahí que el concierto celebrado días pasados en Salamanca haya sido especial por muchas razones, pero a la vez porque ha venido a reconfirmar lo que es la trayectoria de un artista verdadero y por libre. Todo lo que ha logrado se lo debe a su voz y a ese amor órfico, don que el Destino le concedió desde la música y la palabra inspiradas.
(publicado en la página de facebook "Amigos de Antonio Colinas" el día 24 de septiembre de 2018)